Más vale prevenir que curar y para eso nada mejor que una buena, rica, sana y variada alimentación a modo de prevención. Reforzar nuestras defensas tendrá a mediano y largo plazo muchas ventajas. La clave está en saber qué alimentos van a ayudarnos a reforzarlas y cómo debemos consumirlos para optimizar todas las proteínas, vitaminas y minerales que contengan. A continuación, algunos alimentos que ayudan a nuestras defensas y ayudan a prevenir enfermedades.
- AGUA. Puede parecer una tontería, pero el agua es la base de todo. De nada sirve cualquier cosa que pueda recomendarte, si no tenemos en cuenta la hidratación de nuestro organismo. El agua cumple una función ya no sólo hidratante, sino también purificadora, ayuda a eliminar las toxinas del organismo. Además, mantener un correcto estado de hidratación en nuestro cuerpo mejora el funcionamiento de los diferentes órganos (riñones, hígado, sistema inmunitario).
- JUGOS. ¡Qué mejor forma de tomar agua que con ricos jugos! Casi todas las frutas cítricas contienen altos niveles de vitaminas, concretamente de vitamina C, responsable directa de la mejora del sistema inmune. Puede que caigamos en la tentación de comprar jugos ya exprimidos, pero a no ser que sean cien por ciento naturales y recién exprimidos, estamos malgastando nuestro dinero.
- YOGURT. Es el postre ideal. Contiene bacterias benéficas para la salud que protegerán nuestra flora intestinal y ayuda a la digestión. Es un complemento ideal por la gran variedad de sabores que tienen. Eso sí, procura que sean naturales o bajos en azúcar.
- AJO. El ajo contiene muchas propiedades de prevención contra los virus. No sólo evita que entren, sino que una vez que nos encontremos infectados, el ajo ayuda al sistema inmune a que estos permanezcan menos tiempo en el organismo.
- ALIMENTOS ROJOS. Jitomate, pimiento, fresas, cerezas, sandía y en definitiva todas las frutas y verduras que sean de color rojo. Esto se debe al alto contenido en carotenoides y vitamina A. Ayudan a mejorar y fortalecer el sistema inmune.
- BRÓCOLI. Al igual que las frutas, las verduras ayudan a nuestras defensas. Concretamente el brócoli contiene altos niveles de vitaminas C y E, que son primordiales en el incremento de las defensas del sistema inmunológico. Al igual que con el brócoli, toda verdura de hoja verde es fundamental para reforzar defensas.
- TÉ. Ya sea verde, negro o rojo. Todos tienen polifenoles que ayudan sobre todo a la prevención de enfermedades y aumento de las defensas.
Todos estos alimentos ayudan a fortalecer el sistema inmune, encargado de defender al organismo de los ataques de virus y bacterias. También cuidan al sistema digestivo, cuya flora intestinal es la primera barrera ese defensa natural.
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