Se describe como una sensación punzante, hormigueo o ardor. Pero la garganta irritada es sólo eso: una irritación que inicia en la parte posterior de la boca y se extiende hacia la mitad de la garganta. No es una enfermedad, sino un síntoma, y suele ser el resultado de una inflamación. Cuando la garganta se infecta o se irrita, el organismo envía más sangre a esa zona, llevando leucocitos y otras sustancias para combatir la infección. Y son precisamente éstos los que causan el enrojecimiento, la hinchazón y el dolor.
¿Qué la provoca?
Las causas más comunes de la irritación de garganta son las alergias, las infecciones vitales o bacterianas, y algunos factores ambientales (polvo, poca humedad, tabaco). En el caso de una alergia o de una infección viral, suele deberse al escurrimiento retronasal, que es el drenado de mucosidad excesiva de la nariz o de los senos paranasales en la parte trasera de la garganta. Además, los virus de los resfriados con frecuencia atacan el tejido de la garganta.
Si la irritación es por un virus, suele desarrollarse con lentitud. Dura más, pero es menos intensa que una infección bacteriana (como los estreptococos), que a menudo es repentina e irrita mucho la garganta, provocando fiebre y dificultad para deglutir.
Remedios para aliviarla
Los suplementos recomendados fortalecen el sistema inmunitario, reparan el tejido inflamado de la garganta y calman el dolor. A menos que se indique otra cosa, úsalos en conjunto mientras duren los síntomas. Puedes combinarlos con fármacos para resfriados o alergias, controlados o de venta libre, o con antibióticos si la irritación es por estreptococos.
- Vitamina C. Ayuda a combatir las rinofaringitis. Usada como antihistamínico natural, reduce los cuadros inflamatorios que produce el organismo en gente alérgica.
- Vitamina A. Activa la curación de las membranas mucosas, como las de la garganta
- Equinácea y ajo. Tienen propiedades antibacterianas y antivirales; empieza a tomarlos al primer indicio de irritación.
- Cinc. Ayuda a prevenir la irritación causada por el resfriado; según algunos estudios, pueden acortar la duración de la enfermedad.
Qué más puedes hacer?
- Usa un humidificador o vaporizador moderadamente frío para mantener lubricada la garganta.
- No fumes y apártate de las habitaciones llenas de humo.
- Bebe al menos 8 vasos de líquidos a diario. Los tibios, como las sopas o el té, pueden ser de mucha utilidad.
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