Beber suficiente agua durante el día te permite rendir a tope en todas tus actividades. Aprende por qué y cómo debes mantenerte hidratado y ¡sácale el mayor provecho a tu rutina!
Razones para tomar agua
- Mantente cool. ¿Sientes que el calor es insoportable? Estás deshidratado. Una buena hidratación genera el sudor suficiente para poder regular la temperatura e impedir que siga subiendo. Toma pequeños sorbos durante tu rutina para evitar un golpe de calor.
- Power up. El agua ayuda a transportar nutrientes que ingieres a cada una de las partes del organismo, incluidas tus células musculares. Si el cuerpo está deshidratado, los músculos no tienen fuerza suficiente para soportar un entrenamiento largo.
- Más agil que nunca. Un cerebro bien hidratado maximiza la concentración. Toma agua suficiente y olvídate de dejar caer las pesas en el gym o tropezar en tu clase de baile. ¿Practicas algún deporte? Estarás listo para hacer cualquier anotación, lanzar tu mejor golpe o dar un gran sprint.
- El mejor detox. ¡Nada como sentirte ligero al entrenar! Una buena hidratación permite que tu cuerpo elimine las sustancias tóxicas y las que no necesita. ¿Te sientes hinchada? Bebe agua natural y evitarás la retención de líquidos.
- Capacidad al máximo. Para evitar calambres, músculos cansados y poco flexibles durante tu rutina, incrementa la cantidad de agua que tomas. De esta manera lubricas tus articulaciones y das mayor elasticidad y rendimiento a tus ligamentos.
3 TRUCOS PARA SABER QUE ESTÁS HIDRATADA
- Siente tu cuerpo. No esperes a tener sed para beber agua. La sed es un indicador tardío de deshidratación. Así que bebe líquido constantemente a lo largo del día, no sólo al terminar tu rutina.
- Revisa tu orina. Cuando vayas al baño, checa el color de tu orina. Cuanto más oscura sea, más deshidratada estás. Si por la mañana ya notas un tono café, date a la tarea de traer una botella de 1.5 litros contigo todo el día.
- Pésate. Una forma de saber cuánta agua debes tomar, es llevando un control. Pésate antes y después de hacer ejercicio: por cada kilo perdido, bebe 1.5 litro de agua.
LAS 3 FRUTAS MÁS HIDRATANTES
- La piña ayuda a reabastecer el glucógeno que detiene la degradación muscular y da a tu cuerpo el agua y la energía que necesita. Come una taza en la mañana.
- Las uvas son ideales para hidratarte y, por su consistencia, no bloquean la quema de grasa. Come 20 piezas antes de entrenar.
- Además de brindarte vitamina C y potasio, ingerir una naranja después de una rutina intensa, disminuye tu riesgo de sufrir fatiga, deshidratación o calambres musculares.
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