Para muchos, tomar leche de vaca diariamente es un hábito casi religioso y, aunque no se puede negar su rico sabor, para algunas personas es difícil de digerir. Por suerte, existen opciones que también son nutritivas. ¡Conócelas!
- Leche de almendras. Tiene un sabor suave y delicado; contiene minerales, proteínas y vitaminas A y E. Aporta tan sólo 30 calorías por taza (240 ml), así que la convierte en una excelente opción para cuidar tu peso.
- Leche de arroz. Es ideal para personas con estómago delicado. Las versiones fortificadas te darán la dosis suficiente de calcio. Su consistencia diluida es perfecta para mezclarse con cereales o frutas.
- Leche de avena. Si sientes que te falta energía para salir a correr, la leche de avena es ideal para liberar energía por su alto contenido en carbohidratos. Tomarla mejora la digestión y controla los niveles de azúcar.
- Leche de coco. Su sabor dulce y cremoso la hace perfecta para preparar smoothies, además de ser rica en vitaminas y minerales. Sin embargo, no es recomendable beberla a diario por su alto contenido calórico.
- Leche de hemp. Fortalece el sistema inmune y contiene todos los aminoácidos esenciales. Está recomendada para las personas que sufren de alergias, ya que no contiene ninguno de los principales alergenos.
- Leche de soya. Se recomienda para personas que hacen ejercicio intenso por ser rica en aminoácidos y proteínas. Además, contiene fósforo, que disminuye el dolor muscular y, al ser fuente de electrolitos, evita la deshidratación.
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