Las diminutas semillas de linaza son excelentes para tu corazón. Cómpralas molidas o tritúralas en la licuadora o en el molino de café. Si no las encuentras, búscalas en tiendas de alimentos naturales. Las semillas de linaza son ricas tanto en proteínas como en fibra (más de 2 gramos por cucharada de semillas molidas). Son también una buena fuente de magnesio, básico para controlar el azúcar en sangre porque ayuda a las células a usar la insulina. Estudios determinaron que el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2 aumenta vertiginosamente cuando la ingesta de magnesio es baja, así que completa tu dosis -incluso aunque ya padezcas diabetes-.
¿Comes poco pescado? Aumenta tu consumo de semillas de linaza. Son ricas en ácido alfalinoleico (ALA), que el organismo usa para elaborar el mismo tipo de ácidos grasos que se obtienen del pescado. Las semillas de linaza bajan el colesterol, lo que mantiene el bombeo normal del corazón y evita la formación de coágulos También protegen contra la inflamación, asociada a muchos trastornos relacionados con la edad, entre ellos la resistencia a la insulina y la diabetes.
Buenas para la salud
- Dado que protegen contra la inflamación, tienen un efecto positivo contra afecciones inflamatorias, como la artritis, el asma, la enfermedad de Crohn, el eczema y la psoriasis
- El omega 3 puede ayudar a prevenir e incluso tratar el cáncer de mama, gracias a unos compuestos vegetales llamados lignanos, similares a las hormonas. En el organismo, se transforman en compuestos parecidos a los estrógenos que ayudan a bloquear sus efectos; así, protegerían contra tipos de cáncer asociados a las hormonas, como el de mama. Las semillas de linaza tienen muchísimos más lignanos que cualquier otro alimento de origen vegetal.
- Brindan protección contra el Alzheimer y la depresión (por su alto contenido de omegas).
- Pueden resolver problemas de constipación (aunque hay que consumirlas con moderación).
Consejos de cocina
Los lignanos de las semillas se absorben mejor si se consumen molidas (las semillas enteras son difíciles de digerir). La linaza molida se estropea si no se usa de inmediato , así que tritura las semillas conforme las necesites. A temperatura ambiente se conservan hasta un año; si las compras molidas, refrigéralas.
Aceite de linaza
Proporciona el omega 3 de las semillas sin la fibra o los lignanos. Como la linaza tiende a «licuar» la sangre, consulta a tu médico si estás tomando aspirina o medicamentos anticoagulantes. Este aceite se enrancia con facilidad, así que mantenlo en refrigeración. Añádelo a aderezos para ensaladas, verduras al vapor después de la cocción o a cereales. No lo utilices para cocinar: el calor destruye sus nutrientes.
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